Desde las filas de Diversidad literaria se me comunica
que, de nuevo, un microcuento mío ha sido seleccionado y aparecerá en el libro
que piensan editar en breve, compilatorio del III certamen dedicado a La
primavera la sangre altera. Me llena de
alegría aparecer en numerosas publicaciones de esta consolidada plataforma literaria. Aprovecho una vez más para
mostrarles mi agradecimiento y felicitarles por la buena labor que llevan a
cabo en pro de los autores inéditos o acogidos, muchas veces, al compromiso de
causas benéficas. Muchas gracias a todos y a todas.
Resultados del III Concurso de microrrelatos "La primavera la sangre altera"
Texto copiado del blog de Diversidad L.
Reza el refranero que la primavera la sangre altera. Para
algunos, la menor cantidad de horas nocturnas supone variaciones en la
producción de melatonina, serotonina y feromonas. Para el resto, la cuestión
trasciende lo biológico y se sitúa en el nivel de lo estético y emocional.
Conforme avanza la ciencia, parece cada vez más evidente que somos el resultado
de nuestros condicionantes biogenéticos. Y, sin embargo, existe el libre
albedrío, aquel que nos permite ser diferentes. Entonces, ¿por qué las
estaciones nos conjugan invariablemente en un sentir colectivo compartido?
Son los colores, los olores, los sonidos. Son el cloro veraniego, las hojas
otoñales, la nieve inverlas calles. Es la promesa de vacaciones, la esperanza
del próximo verano. Eso es la primavera.
Conforme avanza la ciencia, parece cada vez más evidente que somos el resultado de nuestros condicionantes biogenéticos. Y, sin embargo, existe el libre albedrío, aquel que nos permite ser diferentes. Entonces, ¿por qué las estaciones nos conjugan invariablemente en un sentir colectivo compartido?
Son los colores, los olores, los sonidos. Son el cloro veraniego, las hojas otoñales, la nieve inverlas calles. Es la promesa de vacaciones, la esperanza del próximo verano. Eso es la primavera.
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